La lumbalgia es uno de los principales problemas de salud del hombre moderno, pero afecta de forma muy especial a las actividades físicas más exigentes, como la carrera a pie de larga duración y especialmente si esta es sobre asfalto o terreno duro.

Al menos tres cuartas partes de la población de los países industrializados ha sufrido alguna vez un dolor intenso de espalda. La lumbalgia mecánica o dolor común en la columna lumbar, genera dos millones de consultas por año entre los médicos de atención primaria. En el mundo del deporte se sigue también esta tónica, a medida que la actividad física es más exigente aumenta la incidencia y gravedad de las lesiones de espalda baja.

En contra de la opinión popular de que las lumbalgias o lumbagos se producen por grandes esfuerzos, la mayoría de ellos son consecuencia de inadecuadas actitudes posturales, defectos técnicos en la ejecución del gesto deportivo o esfuerzos mínimos pero perjudiciales para la buena mecánica de la columna.

Ante el complejo problema que plantea el dolor común de espalda, las soluciones convencionales desde el campo médico no han sido rápidas ni consistentes. Lo que si sabemos es que cualquier tratamiento que busque el éxito (y no únicamente la rápida solución de síntomas) en los citados problemas de espalda baja, deberá estar basado en la observación y cuidado minucioso de la columna vertebral. Esta es la filosofía de la medicina Manual, campo médico que afronta la recuperación funcional del individuo partiendo de las manos como instrumento para diagnosticar y tratar lesiones musculares y articulares de la columna vertebral.

Junto con la interpretación de radiografías, escáner, analíticas o resonancias magnéticas, el especialista manual realiza un examen estático corporal del paciente y unos tests de movilidad muy específicos. La base del tratamiento, en medicina Manual, está constituida por las técnicas del masaje, bombeo miofascial y manipulación vertebral indolora, complementadas con ejercicios individuales de estiramiento y corrección postural.

– Causas del dolor de Lumbago.

Es un cuadro doloroso eminentemente muscular localizado en zona lumbosacra y en glúteos. El dolor lumbar común inespecífico tiene siempre su origen mecánico. Es una situación en que nuestra columna reacciona creando una fuerte contractura de protección lumbar y nos avisa de algo que no ha funcionado bien en dicha zona. Se han descrito seis posibles orígenes para explicar el lumbago deportivo :

  • Muscular : es la propia distensión de los músculos lumbares. Es un cuadro que puede autolimitarse, pero no se sabe muy bien si va a durar días o semanas, por tanto será necesaria la intervención de un médico para que el deportista pueda lo antes posible reincorporarse y hacerlo con el menor gasto mecánico posible.

  • Ligamentoso : al solicitar en exceso ligamentos, se puede desencadenar un cuadro de lumbago cuyo tratamiento más efectivo consistirá en técnicas directas de inhibición local sobre dichos ligamentos.

  • En ramas posteriores cutáneas : la piel de la región lumbar se encuentra inervada por las vías cutáneas de las ramas posteriores con un desfase, puesto que a la altura de la cresta ilíaca, frente a L4 y L5, se encuentran nervios procedentes de T12 y L1. Como todos los nervios sensitivos, pueden originar dolor que se percibe en todo el territorio de inervación, tanto en la región de la cresta ilíaca como en la parte alta de las nalgas, esta descrito como síndrome de la charnela toraco-lumbar. La lumbalgia aparece en la parte baja de la espalda, lateralizada a derecha o izquierda, pero su causa debe buscarse mucho más arriba, generalmente en T11-T12 ó T10-T11, sin que el paciente sienta ningún dolor a este nivel.

  • En articulaciones vertebrales posteriores : las lumbalgias por este origen han sido consideradas como causantes de un tercio del total de los dolores lumbares. Sin embargo, no se conocen bien los mecanismos que precipitan en última instancia al dolor.

  • En disco intervertebral : el lumbago estaría evidenciando un desgarro más o menos etenso de fibras anulares, sería algo así como un esguince discal. La mejor o peor cicatrización de dicha zona, explicaría las continuas recaidas.

  • En articulación sacroilíaca : es un bloqueo de la articulación que se manifiesta por dolor lumbar unilateral y es más frecuente en la mujer por la especial disposición de su pelvis. Podría ser la explicación de numerosos cuadros lumbares menores de corredores.

La Pseudociática.

Se presenta con dolor agudo en zonas lumbar y glútea, siendo unilateral sin irradiación a pierna o pie. Lo más lejos que llega es al hueco poplíteo, lo que nos sirve para iniciar el diagnostico diferencial con ciática. Presenta, casi siempre, buenos tests de elevación de pierna, no presenta parestesias ni signo alguno de afectación radicular, siendo constante el punto de Valleix positivo en glúteo. Pero el dolor lumbar, y sobre todo glúteo, es muy molesto.

Se asocia a un síndrome de compresión del músculo piramidal de la pelvis, esto es un hipertono de los rotadores pélvicos externos. También se ha hablado de nervios ciáticos plurirramificados, que son atrapados al pasar entre las fibras musculares de la zona glútea.

La Ciática común o Lumbociática.

Es una entidad rara en niños y adolescentes, siendo excepcional después de los 60 años. Suele venir precedida de episodios de lumbalgia común o lumbagos. Según la raíz afectada puede presentar síntomas de parestesias o adormecimiento de pierna, talón, antepie y dedos, siempre en la extremidad inferior.

El dolor es muy variable. En casos muy graves el dolor es sustituido por paresia y parálisis del territorio a la rama afectada, recordemos que el nervio ciático comprende las ramas L4, L5, S1, S2 y S3. El dolor ciático es lacerante, punzante, urente y agudo. Puede ir acompañado de espasmo muscular en muslo y pantorrilla, y mejora con el reposo, aunque dependerá de la naturaleza de la compresión.

Entre los posibles orígenes de la ciática debemos considerar los cuatro más frecuentes :

  1. Canal lumbar estrecho : Este canal se encuentra rodeado de estructuras deformables por el envejecimiento, tales como el disco y la apófisis articulares posteriores, de forma que un abombamiento degenerativo del disco asociado a una hipertrofia artrósica de las apófisis articulares puede disminuir su diámetro. Todo ello condicionará el espacio de seguridad que posee el nervio, y en cualquier postura deportiva o movimiento forzado precipitará la lumbociática.

  2. Estenosis del foramen : la mayor solicitud de las articulaciones vertebrales lumbares provoca osteofitosis procedente del disco o de la hipertrofia artrósica de las apófisis articulares posteriores.

  3. Daño discal : la salida de sustancia nuclear a través de una fisura radial del annulus, más frecuente en su parte posterolateral, se conoce como protusión discal y puede ser motivo de ciáticas, si avanza hasta comprimir la raíz nerviosa. Normalmente es debida a un falso movimiento que aumenta la presión intranuclear y desgarra el anillo u ocupa una ranura ya existente, de forma que la hernia puede entonces exteriorizarse

  4. Fibrosis postquirúrgica : es un tipo de cicatriz postoperatoria que ocupa el espacio epidural que antes de la intervención ocupaba la hernia. Esta fibrosis puede hacerse extensiva y, como si fuera un guante, acaba aprisionando las raíces y provocando dolor.

La Cruralgia.

Menos frecuente que la ciática, pero bastante habitual, se trata de una radiculalgia de origen vertebral, con lesiones idénticas a las de la ciática, pero afectando a los niveles L2-L3 y L3-L4, y con recorrido de afectación neurológica menor, hormigueo y sensación de cansancio muscular o agujetas en la cara anterior del muslo, como mucho se extenderá a la rodilla y espina tibial anterior.

La Meralgia parestésica.

Es una neuralgia del nervio lateral del muslo, el fémoro-cutáneo, procedente del foramen L2-L3. Suele presentarse por golpes laterales o compresión mantenida de la ingle y por tanto del nervio. Es un dolor quemante en fascia lata y/o ingle que evoluciona a perdida de sensibilidad y precedido de molestias lumbares indefinidas.

El Sindrome Coccígeo.

En deportes de contacto o con caídas habituales se muestra como una posibilidad de dolor lumbar, aunque suele deberse más a un cuadro antiguo traumático que mecánico.

En resumen, como muchas son las posible causas del dolor lumbar mecánico que puede afectar al corredor, también el tratamiento y la prevención a aplicar serán distintos y específicos para cada caso.

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